14 de julio de 2008

El Jardín de la Oca


EL JARDIN DE LA OCA
Novela
Toti Martínez de Lezea
Maeva Ediciones 2007
353 páginas

Alto tiene Toti Martínez de Lezea que hace que sus libros se conviertan en trampas de las que es imposible escapar. He leído varios libros de esta prolífica autora, y muy a pesar mío, parece que me he apuntado a un campeonato de lectura rápida: empiezo su lectura y hasta terminarlos ya no los puedo soltar.

El Jardín de la Oca es un libro de aventruas que transcurre a lo largo del Camino de Santiago, empezando desde Nájera y pasando por Burgos, León y Ponferrada hasta llegar a Santiago; pero es mucho más que eso: la autora trata de explicarse a sí misma la proliferación de nombres de ciudades, ríos y regiones a lo largo del Camino relacionado con esta ave palmípeda: Villafranca de Oca, Montes de Oca, río Oja (corrupción de la palabra Oça) o Los Ancares (corrupción de la palabra ançares ) y su relación con los artesanos, canteros y carpinteros que a principios del siglo XIII huyendo de su Languedoc (lengua de Oc o de Oca) natal debido a las persecuciones religiosas de cátaros y albigenses, se establecieron a lo largo del Camino y trabajaron en iglesias y catedrales dejando en cada piedra esculpida su firma en forma de una estilizada pata de oca.

La novela trata también de aunar las diferentes corrientes que desde la época de los celtas han empujado al hombre a peregrinar hacia el finis terrae; recorrido del sol hacia occidente y de su muerte cada anochecer, según creían los antiguos, de aquél que los celtas paganos denominaron "El camino de Lug", el Arco Iris estelar cuya última estrella desaparecía en la mar, donde la tierra acababa; de la leche surgida del seno de la diosa Hera, origen de la Vía Láctea; el río eterno de árabes y judíos, el Camino de Santiago de los cristianos.

Curiosamente, los protagonsitas de nuestra hsitoria forman un microcosmo de la sociedad medieval: un médico judío de Nájera, un herbolario musulmán de Burgos, un cristiano renegado de origen francés, el Comendador de la Orden Templaria en Ponferrada y como personaje principal, un ebanista y escultor de la montañas de Navarra y su prometida, ambos anclados en los ritos antiguos de la Madre Tierra y que el artesano deja esculpida y como camuflada en la estatua de la Virgen Blanca de la Catedral de León.

El Jardín de la Oca, o Juego de la Oca, es un juego de niños que procede de Oriente, pero además para unos es un jiego adivinatorio y para otros el plano secreto de las encomiendas templarias (representadas una vez más por la oca) a lo largo del Camino de Santiago, pero como dice uno de los protagonistas es sobre todo la representación del camino recorrido por el ser humano desde que nace; de sus dificultades, creencias, temores, esperanzas... de su fuerza y de su debilidad... de sus dudas y de sus decisiones, acertadas o no. Es la ruta inmutgable de las estrellas que vemos cada noche sobre nuestras cabezas. Nosotros desaparecemos, pero ellas continúan allá arriba para recordarnos que sólo somos un breve soplo de vida entre millares de otros.



1 comentario:

Cálida Brisa dijo...

Hace bastante nos recomendastes -Por el camino de las grullas, o algo asi...era sobre el Camino de Santiago..
Me encantó,y ahora lo tengo prestado a una amiga, asi que esté, será cuestión de echarle un ojillo a ver si hay suerte y lo veo en la biblioteca, todos no me los voy a poder comprar.