Hace unas semanas las prestigiosa
revista norteamericana Fortune publicaba un extenso y elogioso artículo
sobre las finanzas de la Iglesia
Católica y la ingente labor que el Papa
Francis está realizando para despejar el
oscurantismo que hasta ahora las envolvían,
restablecer la credibilidad y las buenas prácticas de la Banca Vaticana
y para cambiar por laicos a los miembros
de la curia que hasta ahora se
encargaban de gestionar su contabilidad.
El Empeño del Papa es
encomiable y aunque todo no está terminado, según Fortune se
estarían dando los pasos correctos hacia
una mayor transparencia. Esperemos que
el ejemplo que da a la Iglesia Católica
el Papa Francis cunda también y desciende a los niveles de diócesis y parroquias. ¿Son igual de transparentes que lo intenta ser el Papa Francis? Y las Órdenes y Congregaciones religiosas? ¿Quién controla su contabilidad? Que sabemos
de las cuentas y finanzas de Organizaciones como Jesuitas, Opus Dei, o ursulinas?
Curiosamente en el Bangkok Post del lunes aparece una curiosa encuesta sobre el dinero
de los templos budistas. En un
país donde el budismo es la religión
oficial del país y practicada de forma
activa por más del 90% de la
población leo sorprendido el siguiente titular: ”Una
encuesta señala que los budistas desean la
transparencia contable de sus
templos”. La encuesta señala así
mismo que los templos y sus monjes debieran declarar
sus bienes aunque
dichos bienes estén exentos de
pagar impuestos.
En concreto , en dicha encuesta
realizada entre 1254 budistas de diversos niveles de educación y ocupación sólo
un 10,6 % cree que los templos llevan sus cuentas de forma transparente
frente al 58,2% que cree todo lo contrario. Cerca del 87,2% cree que los templos debieran estar obligados
a declarar anualmente sus bienes ante La Oficina Nacional del Budismo. y un 78% cree que los monjes debieran hacer
lo mismo por razones de
transparencia. Algunos de los
encuestados creen que los templos están cayendo en el mercantilismo y que estas declaración de bienes contribuiría a
que prevaleciera la transparencia.
Cuando se preguntó a los encuestados
si las diversas formas de limosas y donativos debieran estar sujetas al pago de impuestos un mayoritario 82,8 % se declaró contrario a
la medida mientras el resto contestó
afirmativamente o se abstuvo de contestar.
Como vemos, en todos los sitios
se cuecen habas, esperemos que muy
pronto la Iglesia Católica abra puertas y ventanas y ventile los rincones oscuros de algunas de sus arcaicas
instituciones. Al menos servirá para
acallar a los ignorantes que hablan de las fortuna de la iglesia
confundiendo los tesoros arqueológicos patrimonio de los lugareños cuando no de toda
la humanidad, con el dinero con el que a
veces malviven esos curas de parroquia que tanta ayuda y consuelo
aportan a los más desheredados de la fortuna.
1 comentario:
Mucho me está gustando tu blog. No te hago muchos comentarios, pero lo leo con curiosidad e interés. Me gusta todo, pero me ha encantado la parte de la meditación budista. Ver esos niños tan pequeños y tan metidos en su interior...
Gracias por compartir con todos esas experiencias tan diferentes de lo que vivimos aquí día a día. Enhorabuena!!!
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