3 de septiembre de 2011

"Siempre duele hablar de la felicidad del pasado"



 El otro día oía una frase que aunque me sonó bonita me dejó pensativo: “Siempre duele hablar de la felicidad del pasado”. Sólo estaría de acuerdo con esta afirmación si lleno de nostalgia me negara a seguir avanzando. El pasado puede haber sido hermoso, los recuerdos imborrables, su evocación placentera, pero es pasado, y por consiguiente ya no es vida. La vida es devenir, la vida es lo que me espera, la vida es lo que sigo construyendo, lo que falta por construir. No hay motivos para que sea menos placentera que la que ya fue. Será diferente, serán otras las personas que nos acompañen, otros los paisajes, otros los caminos, pero seguimos siendo nosotros los que vivimos, los que amamos los que espigamos la belleza a lo largo del recorrido, los que seguimos aprendiendo de los errores de entonces.

Por largo que sea el sendero andado, ya no es . La inmensidad del instante se abre ante mí, ofrecido, generoso, para que lo viva en plenitud, lleno de esperanza por éste y por los instantes que vengan, sin arrepentimientos, sin nostalgias, sin echar nada en falta. Todo lo que somos se lo debemos a nuestro pasado, por consiguiente sigue ahí con nosotros. La felicidad consiste precisamente en disfrutarlo construyendo con él nuestro propio futuro.

4 comentarios:

Nacida en África dijo...

Mi querido Fede: Me ha gustado esa última frase, o mejor, las dos últimas frases. El pasado sigue con nosotros y ha contribuido a que seamos quienes somos en estos momentos pero sirve para disfrutarlo construyendo con él nuestro propio futuro.

Las fotos de Somiedo son preciosas, se las enseñé a mi marido y ya me ha dicho que él tiene que hacer ese camino.:)

¿Cómo fue todo? Espero noticias.

Un fuerte abrazo.

Malena

Consuelo Labrado dijo...

Es curioso que, casi siempre, que echamos la vista atrás todo nos parece maravilloso, quizá porque tendemos a quedarnos con lo bueno y si nuestro presente no es del todo halagüeño añoramos y añoramos sin darnos cuenta que, muchas veces, nos perdemos el momento por no mirar hacia adelante o echar la vista atrás.

¡No tenemos remedio!

Un fuerte abrazo

Anónimo dijo...

Qué bonito y cuánta razón tienes! Quien vive todo el día rememorando el pasado no vive su presente y el presente es el mejor sitio que tenemos para ser felices. ¡Cada momento de hoy tiene tanto por descubrir!
Un abrazo Fede

Irene

José Núñez de Cela dijo...

La frase es preciosa si, pero la felicidad no admite esperas ni revisiones, sino que su construcción se hace dia a dia parando si es preciso para disfrutarla por algun instante.