1 de abril de 2011

Alberto Durero: Manos Orando

Alberto Durero: Estudio de “ Manos Orando”
1508 Dibujo a pincel sobre papel azul preparado
29 19,7 cm
Albertina Sammlung Graphische , Viena


Alberto Durero nació en Nuremberg (Alemania) en 1471. Su padre, orfebre de profesión fue su primer maestro. Heredero del legado artístico alemán procedente del gótico tardío e influenciado primero por la pintura flamenca de Jan van eyck y sobre todo de Rogier van der Weyden se orienta inicialmente hacia un concepto empírico de la pintura que se fundamenta principalmente en la obsevación. Sin embargo, en sucesivos viajes a Italia, trata de absorber también las nuevas corrientes renacentistas. De la simbiosis de ambas corrientes nace una pintura que se caracteriza por conciliar las ricas texturas, los colores brillantes y el gran lujo de detalles del norte con el énfasis en los temas mitológicos y las figuras idealizadas del arte italiano.


La popular obra conocida “Manos orando” fue uno de los numerosos estudios preliminares para el retablo que el alcalde de Frankfurt, Jacob Heller, le había encargado para su catedral. Este estudio en particular, realizado con todo detalle, iba destinado a convertirse en las manos de uno de los apóstolos que rodeaban la tumba vacía de la Virgen en su Asunción a los Cielos. Durero trabajó durante 13 meses en el panel central de esta obra decidido a hacerla tan buena y hermosa , “que seguirá siendo brillante y fresca durante quinientos años”.

Lamentablemente, un incendio acaecido en 1729 acabó con el retablo, pero nos quedan esas manos tan firmes, diáfanas y espirituales para recordarnos , que lo intangible a veces, también, casi se toca.

1 comentario:

Prometeo dijo...

Realmente impresionantes, ese sentido de la realidad y al teimpo como parecen ascender al cielo....un abrazo.