vaporeto, un domigo a las siete de la mañana, con
la más hermosa de las viajeras japonesas?
Entonces sabréis de qué os hablo.
Si habéis sentido su olor mezclarse con el de la madrugada;
si habéis visto sus manos, delicadas como la flor del cerezo;
si habéis visto sus ojos transparentes como las aguas del Xunyang;
si os habéis acordado sin saber por qué del capítulo que Ueda Akinari
dedica en sus Cuentos de la lluvia de primavera a loar la poesía,
y los poemas de los que habla,
que dicen barcos y ríos y amadas siempre lejanas,
si ella se ha ido y no habéis cruzado palabra,
entonces sabréis de qué os hablo
Martín López Vega
Gajos (Pre - Textos 2007)
2 comentarios:
Me recuerda, por lo de los ojos transparentes, a los ojos de agua de Sayuri, la protagonista de "Memorias de una Geisha". Linda descripción. Un abrazo.
la belleza oriental es extraordinaria.., pero la descripcion que hace este hombre no lo es menos..
Un fuerte abrazo Fede..y gracias por compartir
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